03 agosto, 2010

Un día como hoy

De 1960, se declara la independencia de Niger, país sin litoral de África occidental. Limita al sur con Nigeria y Benín, al oeste con Burkina Faso y Malí, al norte con Argelia y Libia, y al este con Chad.

El territorio nigerino ha estado habitado por homínidos desde hace más de noventa milenios, según la evidencia arqueológica encontrada. La evidencia botánica, climática y geológica indica que en esos tiempos el proceso de desertificación de toda la región norte del país aún no había comenzado, o era incipiente.

Grupos que vivían del pastoreo dejaron pinturas rupestres de una abundante vida silvestre, animales domésticos y carretas, así como una compleja cultura que se remonta por lo menos al X milenio a. C., que se destacó por sus obras en cerámica así como por su técnica en el desarrollo de arcos y flechas.

El Imperio songhay se expandió en el actual Níger desde principios del siglo XIV, controlando hasta Agadez antes de su colapso en 1591, entidad de la cual los pueblos zarma y songhai guardan trazas. Tras la caída algunas partes del Imperio y refugiados del actual Malí conformaron una serie de estados Songhai, de los cuales el reino dendi fue el más poderoso.

En el siglo XIX el contacto con Occidente comenzó mediante las exploraciones, en particular las del naturalista Mungo Park y el explorador alemán Heinrich Barth al servicio del Imperio británico.

Los británicos y los franceses se dividieron la región sobre el papel, fijando el límite más al norte de la frontera final, que fue extendida por el oficial Parfait-Louis Monteil en los años 1890. Aunque los esfuerzos franceses por controlar la región comenzaron antes de 1900, varios grupos no fueron sometidos sino hasta 1922, cuando se consolidó la colonia.

La colonización francesa se realizó a finales del siglo XIX. Las fuerzas coloniales encontraron más opsición de la que esperaban, lanzando la expedición punitiva Voulet-Chanoîne, arrasando el sur del país entre 1898 y 1899, dejando a su paso toda una serie de atrocidades. El límite definitivo entre las colonias francesas y británicas se fijó en 1904, el cual seguía el curso del río Níger, desde Timbuctú hasta el lago Chad.

Durante su dominio colonial, los franceses favorecieron a la etnia zarma así como a los practicantes de la religión musulmana, pues presentaba más concordancias con su sistema que estructuras indígenas animistas. Algunas prácticas religiosas que fueron percibidas como amenazantes por la administración local fueron en efecto suprimidas.

Aunque las revueltas de los Tuareg continuaron, tras el sitio de Agadez en 1916 y 1917 los franceses controlaron la zona. A partir de entonces el actual territorio de Níger pasó a formar parte del África Occidental Francesa. La capital se entraba en Dakar, en Senegal, con un gobernador local en Niamey. En 1931 decenas de miles de personas murieron debido a una hambruna, que llevó a muchos otros habitantes a huir a Nigeria. Tras un corto periodo de prosperidad, las condiciones alimentarias difíciles regresaron en 1937 y 1940.

Tras la Conferencia de Brazzaville de 1944, además de conceder la nacionalidad francesa a los habitantes de esos territorios, en 1946 la constitución francesa promovió la descentralización. En 1956 el sistema colonial trató una vez más de adaptarse mediante la Ley de Reforma (Loi Cadre) del 23 de julio. Tras el establecimiento de la Quinta República Francesa en 1958, Níger pasó a ser un estado autónomo dentro de la Comunidad Francesa, cuando prefirió esa posibilidad a la independencia en un referendo que, sin embargo, despertó sospechas de fraude.